La arquitectura
que emerge de la tierra
TEMIS se alza como un círculo de tierra y tiempo. TEMIS es el primer edificio autoportante impreso en 3D sobre la tierra en Latinoamérica.
Construido en la Ciudad de México con una grúa WASP (3D WASP), su forma circular nace del movimiento de un brazo robótico que, en 360 grados, dibuja un espacio social habitable y, a la vez, un pabellón experimental para el encuentro y la reflexión colectivos. Su fachada paramétrica lleva la tierra al límite: líneas que se expanden más allá del perímetro de la base, creando un movimiento que responde a la luz y proyecta sombras en constante transformación. Cada cuadrante del edificio ofrece una experiencia distinta, revelando el diálogo entre la tecnología digital y la materia ancestral. En el interior, la geometría se convierte en ritmo; los sólidos y escultóricos muros de contención no solo sostienen la volumetría, sino también la confianza frente a la memoria sísmica de la ciudad. Sobre este anillo terroso descansa la corona de madera laminada, un círculo preciso que encierra el gesto constructivo, aunando calidez y estabilidad. Allí, donde se encuentran tierra y madera, tradición y futuro, se revela la esencia de TEMIS: una arquitectura que no impone, sino que acompaña.
Más que un edificio, TEMIS es un acto de pertenencia y esperanza, que demuestra que la construcción necesaria del presente puede nacer, una vez más, de la tierra.
PROCESO DE
CONSTRUCCIÓN
El desarrollo de la mezcla fue uno de los mayores retos del proyecto. El material debía alcanzar un estado intermedio entre viscoso y plástico: lo suficientemente fluido para ser extruido por la impresora, pero lo suficientemente estable para soportar el peso de las capas posteriores. La formulación final empleó un tamaño de partícula fino-medio, incorporando fibras pequeñas y arenas para mejorar la granulometría. Se utilizó suelo arenoso local, con arcillas y limos, que proporcionó la cohesión necesaria, controlando siempre el porcentaje de agua: un exceso de agua podría comprometer la resistencia y aumentar la retracción.
En la fase inicial, se ensayaron mezclas con cal hidráulica, lo que permitió comprender el comportamiento de un material estabilizado. Sin embargo, la impresión final de TEMIS se realizó únicamente con suelo, arenas, fibras y reductores de agua, sin adición de cementos. Antes de la construcción, se prepararon varias muestras y se sometieron a ensayos de compresión en laboratorio, alcanzando una resistencia de 31 kg/cm², un valor notable para suelo estabilizado. Estos ensayos permitieron ajustar las proporciones, controlar la retracción y lograr un equilibrio entre plasticidad y resistencia. La mezcla final fue validada por ingenieros civiles mediante modelos y simulaciones sísmicas, lo que confirmó su comportamiento estructural fiable. Su desempeño está directamente ligado al diseño geométrico y paramétrico de TEMIS, donde los muros curvos y los contrafuertes colaboran con el material para consolidar la estabilidad del conjunto.
Más que un punto final, este proceso representa un comienzo: TEMIS inaugura una senda experimental en la que cada avance abre la posibilidad de mejorar la resistencia y el rendimiento. La experiencia demuestra que la construcción con tierra impresa en 3D no es un futuro hipotético, sino una respuesta presente y necesaria a los desafíos ambientales y sociales de nuestro tiempo.
DUPLO DE FACHADA
La fachada paramétrica de TEMIS es un experimento que lleva la tierra al límite de sus posibilidades. Su formación surge de módulos y ondas que interactúan entre sí, generando patrones y frecuencias únicas que se revelan visualmente en cada sección del edificio. No se limita al círculo base: se expande, se proyecta hacia afuera y crea un ritmo ondulante, como si la materia hubiera sido esculpida por el paso del viento. Cada cuadrante ofrece una experiencia distinta. Las líneas se extienden, se doblan y se curvan, produciendo un movimiento siempre diferente al recorrer el edificio. La luz acompaña este gesto: en ciertos momentos acentúa las sombras profundas y, en otros, suaviza los muros hasta que vibran con el entorno. Más que un límite, la fachada se convierte en una expresión cinética: un muro en permanente transformación que guía la mirada y convierte el recorrido en una secuencia de perspectivas siempre renovadas.
PROCESO DEL PROYECTO
Modelo Virtual
Temis se alza como un círculo de tierra y tiempo, o el primer edificio autoportante impreso en 3D sobre tierra en Latinoamérica.
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QR CODE
Escanea y Descubre
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Puedes recorrer virtualmente el edificio y explorar sus formas, su fachada paramétrica y sus espacios.
Construido en la Ciudad de México con una grúa WASP, su forma circular nace del movimiento de un brazo robótico que, en 360 grados, dibuja un espacio social habitable y, a la vez, un pabellón experimental para el encuentro y la reflexión colectivos. Su fachada paramétrica lleva la tierra al límite: líneas que se expanden más allá del perímetro de la base, creando un movimiento que responde a la luz y proyecta sombras en constante transformación. Cada cuadrante del edificio ofrece una experiencia distinta, revelando el diálogo entre la tecnología digital y la materia ancestral. En el interior, la geometría se convierte en ritmo; los sólidos y escultóricos muros de contención no solo sostienen la volumetría, sino también la confianza frente a la memoria sísmica de la ciudad. Sobre este anillo de tierra descansa la corona de madera laminada, un círculo preciso que encierra el gesto constructivo, aunando calidez y estabilidad. Allí, donde tierra y madera, tradición y futuro se encuentran, se revela la esencia de TEMIS: una arquitectura que no impone, sino que acompaña. Más que un edificio, TEMIS es un acto de pertenencia y esperanza, que demuestra que la construcción necesaria del presente puede nacer, una vez más, de la tierra.
